viernes, 2 de junio de 2023

Los pintores clasicistas amaban las arrugas y los fruncidos en una tela o paño, con lo que deduzco que seguramente estarían muy a gusto en una casa sin barrer. Así, la cultura justifica la pereza y la holgazanería. Es un consuelo de tontos pero sospecho que esa es la función principal de la cultura, ayudar a los tontos a entender el mundo. Los listos no necesitan apaños, o sea paños.