domingo, 29 de noviembre de 2015
sábado, 28 de noviembre de 2015
miércoles, 25 de noviembre de 2015
lunes, 23 de noviembre de 2015
domingo, 22 de noviembre de 2015
sábado, 21 de noviembre de 2015
viernes, 20 de noviembre de 2015
"El Estado tiene el monopolio de la violencia legítima". Y también
detenta gran parte de la otra, la ilegítima. ¿Cómo distinguir entonces
una de la otra? Diciendo por un rato: "El Estado soy yo", y
atribuyéndonos la justicia por propia mano (simbólicamente) para sentir
en nuestra mente cuál es una y cuál es otra. Luego le devolvemos los
trastos al Estado. ¿Cómo? Votando.
domingo, 15 de noviembre de 2015
jueves, 12 de noviembre de 2015
martes, 10 de noviembre de 2015
domingo, 8 de noviembre de 2015
En un jardín. Con dos perros. F. y yo.
Prólogo El descenso de la escalera (que no de Bernini)
Acto I La intromisión (choque de miradas con una estatua de Bocherini)
Acto II La ondulación (de la yerba por las carreras de los perros)
Acto III La pelota (danza de la vida de perros y humanos)
Acto IV El agua (de un bebedero portátil)
Epílogo Las manos (que se retuercen buscando las palabras)
Perspectiva de Madrid y telón.
La obra se representó una única vez a beneficio de perros terceros que han de soportar nombres ridículos. La recaudación se les entrega en forma de polvillo luminoso, áureo, que desprenden los dos perros tras su paso por el jardín.
Prólogo El descenso de la escalera (que no de Bernini)
Acto I La intromisión (choque de miradas con una estatua de Bocherini)
Acto II La ondulación (de la yerba por las carreras de los perros)
Acto III La pelota (danza de la vida de perros y humanos)
Acto IV El agua (de un bebedero portátil)
Epílogo Las manos (que se retuercen buscando las palabras)
Perspectiva de Madrid y telón.
La obra se representó una única vez a beneficio de perros terceros que han de soportar nombres ridículos. La recaudación se les entrega en forma de polvillo luminoso, áureo, que desprenden los dos perros tras su paso por el jardín.
viernes, 6 de noviembre de 2015
La atención viene y va, como el viento cambiante que nos olfatea al
rozarnos, pero cuando se magnetiza y encuentra su norte no suelta a su
presa hasta que las condiciones ambientales vuelven a ser oscilantes,
caso de que su ataque haya sido impremeditado, y en caso contrario hasta
que la presa cesa de acoplarse como un guante a su mandíbula, por
desgajamientos o comienzo de deglución.
jueves, 5 de noviembre de 2015
lunes, 2 de noviembre de 2015
El tiempo es una teoría de vasos comunicantes. Cuanto valen unos
segundos? Lo que tarde una pirámide egipcia o una sequoia en morir.
Evidentemente, estos precios no están al alcance del bolsillo de ningún
ser humano, por lo que no es de extrañar que todos sin excepción, en
mayor o menor grado, dispongamos de tiempo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)