viernes, 5 de septiembre de 2025
- ¿Qué miras, Schopenhauer?
- El mundo.
- ¿Y? ¿Da vueltas?
- Alrededor de un astro lejano.
- Sí, ¿y vuelve siempre?
- Gira y gira en constante retorno.
- No me digas más, amigo: creo que ya sé de lo que escribes.
- ¿Sí?
- Tú eres mago y das trucos de malabares.
- Hombre...No está mal visto. Yo soy filósofo y puede decirse que los filósofos hacemos eso.
- Llegará algún día...¿Vosotros decís eso, no?
- Yo digo más bien que el día ya está llegando a su ocaso, pero bueno...Mira, yo soy de los que piensan que la vida es sueño y que el despertar no será dulce.
- Ya...Andas a trompadas con el mundo.
- Por eso digo que el mundo es voluntad y representación.
- ¿Sabías que los indios les robaron a los chinos el secreto de los pañuelos?
- Es posible, llevan lagrimeando miles de años.
- Un pañuelo es todo lo que separa a tu nariz del mundo.
- ¡Está bien visto! Se lo recordaré a mi perro esta noche.
- Te dirá, moviendo el rabo, que quiere cenar...y bien está.
- Hasta la vista, Aristú, se me ha hecho tarde.
- Adiós, Arturo. Y buen olfato.
- ¿Para la filosofía?
- Sobre todo a la hora de la cena.
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