Los hombres luchan, se desesperan y despedazan, sobreviven y luego
mueren. La reproducción es asunto doméstico. La vida, el asiento de la
especie humana, que tiene la cabeza en las estrellas, demanda su rescate
y todos, sin excepción, lo pagamos. Siempre seremos pobres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario