Hoy
es san Juan, que bajó al Jordán a por agua para el canario flauta que
le había regalado Salomé, en prenda de su amor. San Juan lo cuidaba, al
canario, con esmero, atendiendo a la nobleza y prontitud en el pago de
su donadora, pues Salomé había debitado denarios en cantidad
indeterminada para la construcción del Aqua Park del Jordán,
emprendimiento del que san Juan se había hecho cargo en pro del solaz y
disfrute de todos sus bautizados. En efecto, ¿qué mejor fiesta del
bautismo que una tarde de aguas en movimiento?
No hay comentarios:
Publicar un comentario